LA CONSOLIDACIÓN DE LA PRENSA AMARILLA EN LA REGION LIMA

La prensa amarilla en la Región Lima Provincias también se ha consolidado en los últimos años. La existencia de esta vergonzosa prensa, ya no es exclusividad de la capital. La expansión se ha dado a la mayor parte de los lugares de nuestra Patria.

Y hoy podemos observar asombrados, como actúa esa gran prensa capitalina con el fin de asegurar los intereses de sus grandes patrones.

A pesar de que ahora existen Escuelas o Facultades de Ciencias de la Comunicación, sin embargo pareciera que ya no existen los cursos de Deontología Periodística o Ética Periodística, porque los comunicadores salen con otra mentalidad, es decir a deformar la profesión del periodismo.

Cuánta razón tenía el señor Miroquesada, cuando decía que el periodismo podría ser el más vil de los oficios. Hoy deberá estar observando cómo sus herederos conducen los medios de comunicación, en una nefasta, triste y lamentable posición, haciendo un anti periodismo que ha merecido la reacción de  gran parte de la población,  que ven asqueados  como se desinforma, llevados por el interés de grupo de cerrar el paso al cambio que pregona el candidato Ollanta Humala.

En la región Lima provincias, la nueva hornada de periodistas han visto que metiéndose a este oficio o profesión, les puede representar grandes ganancias, sin tener que sacrificarse mucho.

Se han dado cuenta que muchas autoridades acceden al poder, llevando rabo de paja. Entonces es aquí cuando sale a relucir la extorsión y el chantaje, para callar lo que se sabe y dejar a la autoridad cuestionada que siga tranquilamente su ritmo de vida, pero siempre cumpliendo con otorgar su cuota económica, para que la población no se entere de lo que realmente sucede al interior de una dependencia pública.

Ahora el periodista de provincias ha pasado a ser un asalariado más de las dependencias públicas, pues la mayor parte de ellos cobran en casi todas las reparticiones del Estado y en las que lamentablemente existen autoridades cuestionadas y que han llegado al cargo ostentando un pasado no muy claro.

Ya la prensa local no solamente se dedica a cobrar bien a  las municipalidades distritales y provinciales y en otras reparticiones públicas, como Emapas, Semapas, Universidades Estatales, etc.

Desde el 2003 le han puesto la puntería al Gobierno Regional Lima. Y los que han pasado por esa Presidencia se han visto sometidas al poder de la prensa regional.

Pero lo más escandaloso fue lo ocurrido en la gestión pasada de Nelson Chui Mejía, quien se dio el lujo de contratar a  más de 120 periodistas, a quienes los tuvo a su disposición en plena campaña reeleccionista, en donde a pesar de los miles de miles de soles invertidos, no logró la ansiada y apetitosa reelección.

Lo más vergonzoso de todo esto es que una gran parte de la prensa regional Lima provincias, se vio sometida a los dictados del candidato reeleccionista, negándole los micrófonos, las páginas periodísticas y los canales de TV. al entonces candidato Javier Alvarado Gonzales del Valle.

A este candidato lo atacaron sin piedad. Lo llamaban hasta terrorista. Loa adjetivos más bajos fueron para este candidato que se atrevió a retar el poder que ostentaba Nelson Chui.

Al  igual como ahora la gran prensa capitalina, ataca al unísono a Ollanta Humala, así se comportó esta prensa provinciana, dando una muestra de que todo lo malo se aprende y de qué manera.

A pesar de todo ello, Alvarado ganó las elecciones y los ataques de esa misma prensa han continuado, lo que hizo reaccionar al actual Presidente Regional, quien señaló que no les daría ni un solo centavo a esa prensa, por más ataques que le lancen.

 Es que lamentablemente ese gran sector de la prensa regional, han creído que podían ablandar al actual Presidente Regional, tan igual como lo hicieron con otros, pero parece que el funcionario máximo de la región se mantiene firme en su posición y ello está llevando a la desesperación de ese grupo de “periodistas”, que están llegando nuevamente al ataque personal.

Si antes la prensa regional le cobraba al Gobierno Regional Lima por silenciar los posibles actos de corrupción que se daban, ahora la cosa ha cambiado, porque les han cerrado el caño, pero eso no quiere decir que se les acabó el mundo, porque hay otras instancias públicas, en donde todavía, siguen haciendo de las suyas.

Es un mal ejemplo que lamentablemente autoridades sumisas o con un pasado oscuro, han permitido que esta prensa amarilla se consolide en cada una de las provincias.

Si no se accede a los requerimientos de estos malos comunicadores, pues las campañas o ataques personales se dan constantemente.

Y esto ha quedado prácticamente consolidado como un mal precedente que se tiene que erradicar.

Felizmente que la población peruana ha reaccionado y ya no hace caso a esa gran prensa amarilla capitalina o local. Y allí están los resultados.

(huachoopinion.blogspot.com)